Uno de los procesos más extensos y complejos en el desarrollo profesional de los profesores de Educación Física es la preparación de las oposiciones. Un opositor debe dedicar muchas horas de estudio con la finalidad de superar con éxito cada una de las pruebas de aptitud profesional.

En este arduo proceso, el opositor debe contar con una metodología que le permita estructurar y optimizar la preparación teniendo un tiempo y unos recursos limitados. Para ello es imprescindible dominar una metodología de estudio que le permita asimilar los conocimientos de una manera progresiva y eficiente.

Para muchos opositores, la dispersión y la falta de una estructura sólida les impiden lograr los objetivos de manera exitosa. Se ha demostrado fehacientemente que dedicar más horas no conlleva necesariamente a una preparación más eficaz. Para lograr los objetivos planteados y obtener las mejores calificaciones en las oposiciones de Educación Física, se requiere de una metodología óptima como la que imparto en mi academia oposiciones Educación Física.

En este sentido, los estudios de los procesos cognitivos han analizado decenas de factores que influyen en una mejor utilización del tiempo. En función de los resultados, se ha determinado que existen diferentes biorritmos entre las personas y que éstos influyen en la fijación de conocimientos.

Los ciclos o ritmos circadianos toman un papel preponderante en la optimización del esfuerzo cognitivo como un elemento natural de eficiencia y lucidez. Los efectos de la luz natural en el funcionamiento neuronal es diferente en cada persona e incide directamente en el rendimiento cerebral. Tras años de experiencia he analizado la influencia de estos ciclos en la eficiencia personal. Veamos como los ritmos circadianos nos afectan a la hora de hacer una óptima preparación para las oposiciones de Educación Física.

¿Qué son los ritmos circadianos?

Los ciclos o ritmos circadianos son cambios físicos, metabólicos, psicológicos y conductuales que experimentamos los seres humanos en relación al ciclo solar. Estrechamente ligados a la luz solar, los ciclos circadianos varían durante el transcurso de los movimientos de rotación y traslación de la Tierra con respecto al sol.

En un lapso de 24 horas y dependiendo de la ubicación geográfica, la incidencia del sol puede influir en la producción de químicos cerebrales de alerta y actividad. Durante años, el ser humano se ha adaptado naturalmente a mantener la mayor actividad cerebral durante el día y reducirla por la noche. Estos ciclos no son estándar en todas las personas y tienen variaciones que dependen de muchos factores.

El hipotálamo es el encargado de regular la actividad cerebral en relación a los ciclos de sueño y actividad en relación directa con la luz solar recibida por los ojos. A través de un grupo de neuronas el cerebro puede autorregular sus propios ciclos de actividad. 

En un estudio realizado en la Universidad del Rosario en Colombia se determinó  la influencia de los ciclos circadianos en los estudiantes de medicina. Determinaron la relación entre la actividad cerebral y un óptimo aprovechamiento del tiempo de preparación en una de las carreras más extensas de la Universidad. 

Los científicos determinaron que existen tres biorritmos de estudio principales: madrugador, intermedio y vespertino. El cronotipo madrugador se refiere a aquellas personas que realizan su preparación en las primeras horas del día. El intermedio lo hace en las horas que anteceden a la puesta de sol y que continúa luego del atardecer, mientras que los vespertinos son aquellos que prefieren estudiar en horas de la noche.

¿Cuál es la mejor hora para preparar las oposiciones de acuerdo a los ciclos circadianos?

No se han establecido zonas horarias como óptimas, es decir, a pesar de que se han establecido los principales cronotipos, no hay uno que sobresalga sobre otro. Existen cientos de factores que establecen la eficacia del estudio en determinadas horas del día, dependiendo de la estación del año y la ubicación geográfica.

Por ejemplo, los biorritmos cambian diametralmente entre las estaciones de invierno y verano intercambiando los ciclos circadianos en favor de la luz solar. A esto se le debe sumar que un opositor en Sevilla tendrá un biorritmo diferente a un opositor en Vitoria.

Los picos de vigilia y de sueño pueden variar por diferentes razones que afectan la actividad cerebral en determinadas horas del día. Por ejemplo, se ha determinado que los ciclos circadianos suelen ser indiferentes en estudiantes de países ecuatoriales o subtropicales. Al mismo tiempo, los opositores que viven en zonas costeras suelen tener hábitos de estudio distintos a los que viven en zonas de mayor altitud. 

A pesar de no haber evidencia válida que establezca un biorritmo como prevalente, se ha determinado que en cada persona existe un rendimiento diferente. Es decir, generalmente las personas establecen un cronotipo que les permite tener un mayor desempeño.

Determinar las horas en las que la eficiencia es superior es muy importante para establecer una óptima metodología de preparación para las oposiciones. En este sentido debemos establecer nuestras horas de mejor aprovechamiento del tiempo en estos tres cronotipos:

Cronotipo madrugador

Aquellos opositores que prefieren estudiar en las primeras horas del día, suelen aducir que el silencio y la frescura de la madrugada los hace concentrarse aún más. Estos opositores suelen tener un pico de vigilia antes de la salida del sol o en las primeras horas de la mañana.

Se ha establecido que aproximadamente un 25% de la población se corresponde con este cronotipo. Por tendencia general, este tipo de opositores van reduciendo su ritmo de actividad cognitiva a medida que avanza el día. Su mínimo pico de vigilia se encuentra en horas de la noche.

Cronotipo vespertino

Este es el cronotipo del opositor totalmente contrario al madrugador, son personas que suelen encontrar un mayor pico de eficacia en las horas de la noche. Tienden a ser personas que encuentran mayor concentración a partir de la caída del sol y pueden tener gran resistencia al sueño nocturno. Aproximadamente un cuarto de la población se ubica en este cronotipo y tienden a tener menores ritmos de actividad en las primeras horas de la mañana.

Cronotipo intermedio

Aproximadamente la mitad de la población se encuentra en este cronotipo. Son las personas que comparten su actividad entre el día y la noche sin mayores problemas. El intermedio es un opositor que no tiene una clara preferencia por las primeras horas de la mañana o las últimas de la noche. Su horario de estudio se asemeja mucho a los horarios de la mayoría de los trabajos, con jornadas que pueden iniciar a media mañana y terminar hacia el final del día.

En este último sentido, es justo aclarar que muchos opositores deciden adaptarse a determinados ciclos circadianos ajustando sus horas de preparación con otras actividades. Los opositores que deben compaginar su preparación con actividades laborales, familiares o académicas, deben dedicar sus horas de estudio fuera de los horarios “regulares”.

Sin importar la hora de preparación debes adoptar una metodología que  permita optimizar el tiempo dedicado al estudio y sacar el máximo provecho a las jornadas de preparación. Con mi metodología y las técnicas de estudio podrás obtener el éxito. La metodología de trabajo que imparto en mi academia oposiciones Educación Física es totalmente práctica y ha permitido obtener plazas en el sistema  educativo actual a un alto porcentaje de opositores.